Lo más seguro

Si os digo "tenemos que hablar", ¿cómo os sentís?. Y si digo "¡tenemos que hablar!", peor ¿no? me lo imaginaba. Y es que no se me ocurre ninguna manera de decirlo que consiga suavizar el impacto.

No sé a vosotros, pero cada vez que alguien me dice la frasecita en cuestión (como si hasta entonces hubieramos estado haciendo señales de humo o farfullando incoherencias) siento un desasosiego, un pálpito, un no se qué. Porque si alguien que normalmente está contigo y te habla sin necesidad de advertirte de que va a hacerlo te dice algo así, es para contarte algo malo. Seguro.

Imaginate que va tu padre y te suelta "tenemos que hablar". Te cae un marrón de los guapos. Seguro.

O que és un amigo que te dice muy serio " tio, tenemos que hablar". Te cuenta un marrón de los guapos.Seguro.

O es tu jefe quien te dice " Fulano, tenemos que hablar". Estás en un marrón de los guapos. Seguro.

Y si es tu pareja quien te dice "¡ tenemos que hablar!" ( para las parejas siempre es imperativo). Te monta un marrón de los guapos. Seguro.

Y digo yo: ¡ si me va a caer igual! ¿ para qué avisan? ¿No se dan cuenta que te hacen sufrir el doble? ¿ o el triple? Primero porque ya intuyes que va de marrones, después intentando adivinar cuál puede ser y por fín cuando te lo dejan caer y era, seguramente, lo último que esperabas.

Yo he desterrado ésta costumbre de mi vocabulario. Así molesto menos, no doy pistas y si he de entrar a matar los cojo desprevenidos.

Y ,por lo menos, aquellos a los que les quiero contar algo amable lo saben de antemano. Es mucho más dulce y más sugerente decir simplemente :¿hablamos?.
Seguro.