sábado, 31 de mayo de 2008

¿A qué jugamos?

Supongamos que una noche estás en casa disfrutando de un relajante programa de televisión y desconectada del mundo exterior, cuando de repente él entra por la puerta y se queda yerto.
La imagen es horrible-dice.
¿Por qué es horrible?-contestas.
Grissom está verde-dice.
Está bien-replicas- No lo toques.

Ya puedes decir lo que se te antoje, porque no te va a hacer ni caso. Ha tomado el mando. Y se va a pasar por lo menos media hora enredando con todos los botones, así que mejor que te olvides de lo que estabas viendo.

Este fenómeno recibe el nombre de megacompostura , es decir, un hombre ve algo que no funciona muy bien y lo convierte en algo que no funciona en absoluto. Imaginemos por un momento que es una aspiradora con un poco de hipo, cuando termine con ella le habrá contagiado una versión electrónica de la tosferina. Y en tan solo veinte minutos.
A los hombres no les gusta arreglar cosas que no funcionan. Lo que les gusta es "perfeccionar" cosas que sí funcionan.

¿Por qué lo hacen? Algunos antropólogos lo han definido como el imperativo del juguete. Según parece todos los hombre adultos sienten pasión por cosas que hagan "cling" y "ping" , y que tengan un montón de hileras de lucecitas de colores y de interruptores. Y no son capaces de entender porque tú no compartes esa pasión.

La diferencia está en la infancia. Cuando somos crios, a las niñas nos da por jugar con nuestras muñecas a que somos maestras, actrices, cantantes o médicos y soñamos con convertirnos en todas esas cosas, por lo que al llegar a adultas lo más seguro es que lo seamos.
Pero un niño no acaba convirtiéndose en tren, ni en airgamboy ni en pelota de futbol, por lo que de mayores siguen encantados de poder tener juguetes. Y no veas si se les estropean, no pueden soportarlo.
Si se ha pasado los últimos cinco fines de semana tratando de ajustar la suspensión de su Yamaha, tendrás que recordarle que comer, dormir e ir al baño son elementos básicos necesarios para la supervivencia humana.

Pero si de verdad quieres practicar la solidaridad y que él piense que no existe ninguna como tú, ayúdale a arreglar algún juguete, aunque tengas que pasarte toda la mañana de rodillas en el salón a 10 cm del altavoz derecho de su "hipermegasuperequipo" de música, mientras el sube y baja el volumen mientras te dice: "¿escuchas ahora ese silbidito que te decía? Espera, espera...ahora ¿lo oyes?".

Te adorará para siempre.

Ganando puntos

Viendo un telediario me enteré de la noticia. No sé muy bien el objetivo de su creador, pero me resultó cuanto menos chocante que alguien se hubiera decidido a editar un diccionario de insultos. Si, habeis leído bien, de insultos.
Bien es cierto que algunos de los que ponían como ejemplo están completamente obsoletos, vamos que no los oyes ya ni en boca de los más viejos del lugar. Lo que chocaba era que no se atrevieran a nombrar en el reportaje los que están a toda hora circulando y que dejarían sonrojado a cualquier carretero que se precie. ¿A que venía tanto decoro? Si alguien ha recopilado un montón de insultos ( porque el libro era gordo de narices) será porque se utilizan ¿no?

Pensándolo un poco más me dí cuenta de que, en el fondo, no es una mala idea. A lo mejor conseguimos elevar el nivel cultural de la sociedad en general y de los jóvenes en particular, a base de hacerles aprender sinónimos de insultos que, aunque les parezcan raros, pueden conseguir despertar su interés y mantenerlos entretenidos, demostrando de paso lo rica que es la lengua española y que hay que tratarla como se merece.

¿No sería mejor escuchar a los concursantes de OT diciendo palabras refinadas y no por ello menos peyorativas o hirientes, sin necesidad de dar un respingo cada vez que sueltan un "hostia, que fuerte"?
¿No sería posible que consiguiéramos mantener discusiones sin necesidad de mentar a la madre de nadie?
¿Y si en las autoescuelas al mismo tiempo que te enseñan a conducir te recomendaran algunas palabras adecuadas para enviar al resto de conductores justo ahí, pero con elegancia?
Yo lo propondría en los colegios como trabajo para mejorar nota. El que más palabras consiga reunir poniendo verde al de enfrente sin utilizar los vocablos barriobajeros a que nos tienen acostumbrados, canasta de trés ( que viene a ser como tirar desde los 6,25, tiene punto adicional).

¿ Pues no me han entrado ganas de probar? A ver....

Por lo fino: ¿Se puede saber por qué hay tanto estulto, bastardo, rufián, fastidiando la lengua con sus excesos?

Traducción: ¿Se puede saber por qué hay tanto gilipollas, hijo de puta, cabrón, jodiendo la lengua con sus mamonadas?

Vale, puede que quede mucho más refinado lo primero, sin duda. Lo malo es que si me empeñara en hablar así solo me entendería yo. Lo más seguro es que, si preguntarais, la mayoría no sabría deciros el verdadero significado de ninguna de las palabras que he utilizado en cualquiera de las dos versiones.

Demasiado zopenco suelto es lo que hay. Caramba!.

jueves, 29 de mayo de 2008

Un jueves al sol

Me gustaría tenderme sobre un piedra al sol como las lagartijas, sin más objetivo que el de calentarme y descansar. Dejar volar mi imaginación sin destino conocido, simplemente dejar que fluyan pensamientos inconexos, deshilvanados. Estirar todos mis miembros uno a uno, poco a poco, mientras siento en mi cara el suave roce de la brisa cálida. Y sonreir.

Disfrutar de un breve pero reparador momento de calma en el que, por fin, todo parece que encaja. Que la vida me ha dado un respiro y me ha devuelto la oportunidad de saborear buenos momentos.

A diferencia de las lagartijas, no tengo más remedio que salir al mundo cuando hay tormenta y hace frio; cuando el sol se empeña en abandonarnos; incluso cuando se pone tan oscuro que las tinieblas parecen ahogarnos. Aunque tenga miedo de la oscuridad. Aunque no soporte el frio y la desolación. No tengo más remedio, tengo que seguir.
A veces me gustaría encontrar una hermosa y acogedora piedra en la que esconderme pero, no solo es imposible, es que tampoco estaría allí demasiado tiempo. Es mi naturaleza. Acabo saliendo del escondite y luchando contra las inclemencias con todo lo que tengo.No importa si me mojo hasta los huesos o si puede partirme un rayo. Tengo que hacerlo.Debo hacerlo.

Porque si no lo hiciera así, la recompensa de volver a mi piedra a disfrutar del calor del sol no valdría la pena. Solo cuando has luchado de verdad por lo que deseas, puedes tumbarte por fin relajado y en paz a disfrutar. Del calor de unos ojos que te miran con pasión; del calor de unas manos que te acarician con ternura; del calor de unos brazos que te acunan con afecto; del calor de un pecho amigo; del calor de palabras que llenan de fuego tu corazón.

Hoy me he dado cuenta de que ya no hay razón para sentir miedo y, como las lagartijas, voy a abandonarme a ésta mágica sensación de que la vida me sonrie y no tengo más preocupación que la de calentarme un ratito al sol de la felicidad.



lunes, 26 de mayo de 2008

Sin dormir

Un amigo mio me comentaba ésta misma tarde que para tener un blog había que ser muy constante, tener tiempo e inspiración, porque no todos los dias debe estar uno de humor o de imaginación para escribir.
En lo del tiempo tiene más o menos razón.Yo misma me lo agencio en los ratos más insospechados, como ahora que le robo tiempo al sueño para visitar algunas páginas y decidirme a escribir lo que quiero. Mañana lo pagaré con unas ojeras gloriosas.

Sin embargo no estoy tan de acuerdo con lo de la inspiración. Al fin y al cabo no se trata de escribir un best-seller, ni de derramar grandes pensamientos filosóficos, ni nada por el estilo.
Me parece mucho más sencillo.Todo se resume en compartir experiencias, en contar anécdotas diarias o simplemente en fliparse y dejar volar tu mente hacia el desahogo que necesite.

Él mismo me ha servido de inspiración en más de una ocasión, porque ha sido amable, o me ha contado algo interesante, o simplemente ha compartido un poco de su tiempo conmigo.
O mis hijos que me cuentan sus proyectos y sus problemas , sus ilusiones y sus desdichas, y que además me alientan a seguir.
Mis amigos, que nunca lo leen pero que siempre saben lo que he escrito.(¿A qué me suena esto?)
Mis compañeros de trabajo, que no hacen más que dar ideas malsanas a las que nunca hago caso.
Un libro interesante.
Una canción que me conecte a un sentimiento.
Un momento con magia.
Una subidón de adrenalina.
Una bajada de presión.
Un recuerdo suspendido en mi memoria.
Un deseo que puede que nunca alcance a conseguir.

Y todos vosotros. Un montón de desconocidos estupendos que hacen que valga la pena intentarlo.

Gracias.

domingo, 25 de mayo de 2008

Seguir amando

Amarte a ti no es lo mejor, lo tengo claro, habiendo tantas cosas que hacer, menos traumáticas. Como hallarle figuras a las nubes, como ir al cine o no hacer nada.

Amarte a ti no es lo mejor, pero me gusta. Quizás estoy jugando al masoquista, en vez de distraerme con el futbol o con el Internet como hacen todos.

Amarte a ti no es lo mejor pero es perfecto, para encontrarle algún sentido a ésta rutina de ser por siempre sólo un ciudadano. Sólo uno más.

Amarte a ti me hace sufrir, que buena suerte. Para acordarme de que existo y de que siento. Para tener en que pensar todas las noches. Para vivir.

Amarte a ti es un veneno que da vida. Es una antorcha que se enciende si se apaga. Es lo sublime junto con lo idiota. Es lo que siento y... a quién le importa?.

Amarte a ti es la verdad más mentirosa. Es lo mejor de lo peor que me ha pasado. Es la ruleta rusa por un beso, es lo de siempre improvisado.

Amarte a ti es un error, dice un amigo, que cree que ser feliz es estar libre y se pierde el matiz que da lo incierto.

Amarte a ti es la embajada de un instante en mi cerebro. Es también haberte odiado un par de veces.
Amarte a ti es un absurdo y lo sabemos. Y así será....

Mientras nos dure.


(R.Arjona)

(Para Marieta, que sabe lo difícil del amor y sus efectos)

viernes, 23 de mayo de 2008

Para vivir

Amo y espero....

Espero que te des cuenta de lo difícil que es para mí intentar encontrarte.

Espero que veas la vida con esperanza a pesar de los golpes.

Espero que abras tu corazón y lo compartas con la gente que te ama.

Espero que derroches tu alegría de vivir la vida.

Espero que podamos seguir tejiendo fantasías.

Espero ser tu apoyo en los malos tiempos.

Espero que tú seas el mio.

Espero seguir contigo aunque no lo consigamos.

Espero que siempre cuentes conmigo.

Espero que siga valiendo la pena estar aqui mañana.

Espero una vida llena de vida.

Espero que lo entiendas.

Espero....




miércoles, 21 de mayo de 2008

En el término medio

Dije en otra entrada que un día hablaría del feminismo y de la cantidad inmensa de burradas que se pueden hacer en su nombre. Y no será porque esto no se ha hecho antes (burradas) en nombre de causas más justas como el amor, la paz o Dios. Nunca aprendemos.
Si quieres solucionar una situación que no te gusta, digo yo que lo primero sería reconocer la causa que la creó ¿no? Pues las más listas entre todas nosotras fueron un dia y encontraron la solución: los hombres. ¡Y se quedaron tan anchas!
Hay que reconocer que criminalizar a alguien por nuestros errores es la pera. Yo, si pudiera lo haría a toda hora. Pero es mucho más elegante y más justo reconocer cuándo has sido tú la causante de los daños.



Al principio de los tiempos, los hombre iban a cazar y darse mamporros y las mujeres se quedaban en las cuevas enseñando a sus hijos a imitar a sus padres y a sus hijas a hacer las tareas domésticas. Luego los hombres se iban a la guerra a dar más mamporros, habían evolucionado y sabian hacer fuego y catapultas para tirar piedras enormes y se habían inventado una forma de comunicarse, la escritura, y en general se lo pasaban bomba. Y las mujeres seguían en sus cuevas (que ya tenían ladrillos y tejados) y enseñaban a sus hijos a emular a sus padres y a sus hijas a hacer las tareas domésticas y a consentir que sirvieran de moneda de cambio en alianzas matrimoniales. Después llegaron honrosas revoluciones (la francesa , la rusa, la industrial) que los hombres inventaban para seguir dándose mamporros físicos, psíquicos o de los que fueran para seguir divirtiéndose, mientras las mujeres seguían en sus cuevas (que entonces ya podían tener varias plantas de altura) enseñando a sus hijos a imitar a sus padres y a sus hijas a hacer las tareas domésticas y a buscar "un buen marido" (al fin y al cabo la nobleza es muy reducida y cada uno tiene que procurarse el sustento) que pudiera hacerles una cueva de cuantas más plantas mejor.


Un buen dia unas cuantas hijas de sus madres se atrevieron a levantar la voz y a decir que " basta ya" hombre. ¿Hombre? ¡ pero si las que más las vilipendiaron y maltrataron y vejaron e insultaron fueron las otras mujeres!¿A quién se le ocurre? ¿Hacer lo mismo que un hombre?¿ Tener sus mismos derechos ? ¿Ocupar sus cargos?¿Votar? ¡Estas han perdido el juicio!
Pero siempre hay alguna espabilada que se da cuenta del potencial de lo que se trae entre manos y de que solo hay que hacerlo crecer adecuadamente. Así, las que empezaron pidiendo el voto (cosa muy loable), acabaron culpando al varón de todos sus males, olvidándose impúdicamente de como habían llegado a su situación.


Y seguimos igual. Da igual que nos hayamos liberado ( esto es básicamente mentira, mientras que a las realmente liberadas las sigan llamando zorras), que hayamos renunciado a los pequeños placeres de la vida como que un caballero te abra la puerta, te deje su asiento o te invite al cine (que desfachatez ¿acaso creen que somos pobres desvalídas?), que exijamos que nos llamen médica o presidenta o lo que sea, que ocupemos cargos importantes o que vayamos a la luna.
Seguimos siendo unas ceporras.
Porque no hemos aprendido nada. A base de culpar a los hombres nos hemos convencido de que nuestro papel no es ser como ellos , es derrotarles. Y hemos vuelto al principio pero al revés.
Nos hemos convencido de que, en desagravio, los hombres deben concedernos todo lo que pidamos sin pararnos a pensar si es justo, equitativo e igualitario. Así, conseguimos hacernos presentes por decreto pero no por méritos y nos quedamos tan felices; les decimos que sus hijos, los que hicimos a medias, son solo nuestros porque están en nuestros cuerpos y que solo nosotras podemos decidir qué hacer con ellos ( pero que se preparen si decidimos tenerlos) y nos parece dabuten; hablamos el doble porque ahora hay que pronunciar siempre el masculino y el femenino para contentar a todos/todas ( que cansino ¡ por Dios!) y estamos encantadas.

¡Parecemos idiotas!
Yo no quiero un cargo solo porque soy mujer, lo quiero porque lo hago mejor;  ni quiero un trabajo porque soy mujer, lo quiero porque soy igual de lista y eficiente ( a lo mejor más);  ni quiero quedarme con sus hijos porque soy mujer, lo quiero si realmente conmigo están mejor; ni quiero que me paguen lo mismo porque soy mujer, lo quiero porque me lo gano;  no quiero tener que esforzarme el doble para conseguir la mitad;  y, sobre todo, si al final consigo algo no quiero que el resto de mujeres piense que lo tengo por mi cara bonita, porque entonces nunca llegaremos a ninguna parte.



No es que esté en contra del feminismo, solo que yo prefiero hacerlo a mi manera y quedarme en el término medio (dicen que es donde está la virtud):  femenina y antimachista. Y sobre todo, no quiero construir un mundo donde las mujeres se pasen el dia dando mamporros mientras los hombres se quedan en las cuevas enseñando a sus hijos ( de cualquier sexo) a andar por la vida.

martes, 20 de mayo de 2008

Sin manual

Hoy es el cumpleaños de mi hijo.Con un poco de suerte menos de un tercio de su vida.
Por casualidad también es el cumpleaños de un amigo que acaba de ser padre y que no sabía si lo llamaba para felicitarle por una cosa o por la otra.
Le oía hablar de su hijo recién nacido y me resultaba imposible no recordar como me sentí yo cuando nacieron cada uno de mis hijos.

El primero impone, porque no tienes experiencia y la vida sigue empeñada en enviarte a los niños sin instrucciones, así que decidí dejarme llevar y disfrutar del momento esperando alguna señal que me hiciera más facil la tarea. Y llegó.

Una noche, después de amamantarle y cambiarle los pañales, me quedé mirándolo embobada como hacía siempre. Tenía poco más de un més de vida y era el centro de mi universo. Entonces, por primera vez me di cuenta de que me miraba.
Por primera vez tomé conciencia de que aquella vida que tenía en mis brazos era una personilla independiente, libre ,autónoma y única.
No me pertenecía, se pertenecía a sí mismo. Y ese momento marcó el resto de mi relación con él y con el resto de mis hijos.

Convencerme de aquello me hizo respetarles y empujarles a ser ellos mismos, lo cual es divertido y perplejo al mismo tiempo. ¿Como siendo todos mios y educados por igual pueden ser tan diferentes? ¡Ah, milagro de la naturaleza y las personalidades!
También me convencí de que no eran de"mi propiedad" por más que los llame mios y que tenía que ayudarles a volar por el mundo por sí mismos.

No se si lo he hecho bien o mal, pero lo he hecho con el corazón. Y ellos han crecido dándome satisfacciones y quebraderos de cabeza (como todos) y haciendo que me sienta orgullosa de ellos. De los tres.

En lo más de las casualidades me pongo a leer una revista y encuentro lo que a continuación voy a transcribiros:

"Tus hijos no son tus hijos
son hijos de la vida
deseosa de sí misma.
No vienen de ti
sino a través de ti
y,aunque estén contigo,
no te pertenecen.
Puedes darles tu amor,
pero no tus pensamientos,
pues ellos tienen sus propios pensamientos.
Puedes abrigar sus cuerpos, pero no sus almas
porque ellos viven en la casa del mañana,
que no puedes visitar,
ni siquiera en sueños.
Puedes esforzarte en ser como ellos
pero no procures hacerles semejantes a ti,
porque la vida no retrocede
ni se detiene en el ayer.
Tú eres el arco del cual tus hijos,
como flechas vivas,
son lanzados.
Deja que la inclinación
en tu mano de arquero
sea para la felicidad." (El Profeta. Khalil Gibran)


Para mis hijos que algún dia serán padres.

Y en especial para tí, Javier. Deseo de corazón que siempre te esfuerces en sentirte orgulloso de tí mismo y que encuentres el amor de tu vida.

lunes, 19 de mayo de 2008

Rebajar la presión

Cuando empece con esto del blog nunca crei que acabaria sometida a tanta presion un blog basicamente es un sitio donde uno se divierte se desahoga se rie se alivia o lo que quiera simplemente se comunica en mi caso va a acabar por convertirse en una cruz y no solo porque los hay muy lineales y se lo toman como algo personal ya lo dije un dia sino porque ahora van y hacen escarnio de mi forma de escribir vale que yo estudie hace varios siglos cuando la ortografia y las reglas gramaticales se explicaban de otra manera incluso cuando se creia eso de la letra con sangre entra y no lo hice mal del todo pero despues de los años transcurridos es normal que se me olviden las cosas ya sabeis la edad y el amigo aleman sin embargo a pesar de mis lios con los acentos creo que no lo hago tan mal y por lo menos no pongo faltas que hieren a la vista sin embargo ultimamente me han salido varios pepitos grillo que mas alla de decirme si les gustan mis historias o si entienden el estado de animo con el que escribo no hacen mas que decirme que a ver si aprendo de una vez que ya soy mayor para tonterias que si me van a regalar un diccionario o un manual y lindezas por el estilo uno mi propio hijo que va de listo y ultradefensor de la lengua como si yo viviera para asesinarla y el otro un amigo que además de editor de una revista y escritor en sus ratos libres a ver si acaba la novela que me dejo totalmente a medias es un fanatico del lenguaje y no hace mas que decirme lo que debo mejorar como si yo tuviera amigas catedraticas a las que puedo consultar cuando se me antoje reconozco que la ultima presion me la he puesto yo solita por cotilla y por inconsciente y eso que no he hecho mas que lo que hace todo el mundo visitar otros blogs y poner comentarios de vez en cuando y va y resulta que uno de ellos es de un profesor de lengua para morirse os imaginais el cague si le da por pasarse por aqui y acaba dandole la razon a mis correctores asi que hoy en honor de todos ellos he decidido rebajar la presion y para todos aquellos que se crean que escriben mejor que nadie he hecho esta entrada sin ningun tipo de signo ortografico espero que alguno tenga las agallas suficientes para ponerlos donde tocan y cuando acaben que me permitan comprobar si lo que yo queria decir es lo que ellos hicieron ale chicos ya podeis darle a los puntos y las comas y los acentos y las interrogaciones y las admiraciones y las mayusculas y las minusculas y cuando es punto y seguido o cuando punto y aparte o cuando punto y coma yo solo puedo decir que esto es punto y final

viernes, 16 de mayo de 2008

Y no cuesta dinero

Mi amigo Alvaro que es bueno, amable y tierno como un bizcocho, pero que también es un poco raro (alguien que dedica su tiempo a aprender sánscrito no es muy normal) me dijo una vez que nunca en su vida había visto un naranjo y mucho menos olído el azahar. Es de Madrid, pobre, y alli no debe oler a flores precisamente.
Y no es porque no haya visitado Valencia alguna vez, pero nunca ha coincidido con las fechas en que nuestros campos se llenan del aroma de los árboles en flor. Así que por mucho que intentara explicarle lo bien que se siente uno aquí cuando empieza la primavera no era capaz de entenderlo. Debe tener la pituitaria destrozada de la polución ( no así la nariz que, digamos, es acorde con su tamaño general).

Y ¿debes dejar a un buen amigo en su ignorancia? ¿no debes hacer algo para que no se pierda la experiencia olfativa más agradable que podría encontrar?

Ni corta ni perezosa puse en marcha un plan siguiendo el viejo y conocido dicho de "si la montaña no va a Mahoma, Mahoma irá a la montaña".

Cuando empezó la siguiente floración compré en el super una caja de galletas de mantequilla de esas metálicas, que me comí casi del tirón porque si las sacas y las dejas por ahí pierden mucho y no están para que se estropeen.
Acto seguido me fui al campo y elegí el mejor naranjo y el mejor limonero que encontré y me puse a recoger flores para llenar la caja. Las cogí mezcladas porque para mí las del limonero son más resistentes que las del naranjo, pero yo creo que huelen menos.
Cuando tuve la caja llena hice un paquete que le remití por transporte urgente, con un mensaje que decía " te envío un poco de mi tierra para que sepas lo que es estar en la gloria".
No os podeis imaginar como fué la respuesta, creo que agotó todos los superlativos conocidos y hasta inventó algunos. Pero lo que más me gusto fué cuando me dijo " nunca habian hecho algo así por mi".

¿ Lo entendeis? Tan solo era una caja llena de flores, que no me costó ningún esfuerzo sino más bien una diversión conseguirle. Y a cambio compartimos un gran momento de amistad, camaraderia y afecto ( ya os he dicho que es muy tierno). ¡¡Genial!!

¿Tánto cuesta pensar qué cosas, por sencillas o insignificantes que parezcan, pueden hacer felices a las personas que nos importan?

Como un difraz de papel para una fiesta, una pancarta y cuatro canciones para "el partido" de baloncesto, cocinar su plato favorito, grabar canciones de amor....

No tengais miedo. Es hermoso dar y te lo devuelven multiplicado.

martes, 13 de mayo de 2008

El ombligo del mundo

A veces, en el momento menos pensado, pasan cosas que te hacen ver la verdadera dimensión de la vida y de ti mismo.
Los que me conocen saben que no paso por el mejor momento de mi vida y que justamente ahora es cuando posiblemente más necesito de la gente que quiero y que sé que me quiere. Así que me dedico a ello, a estar con esa gente y soltar mi tristeza, mi preocupación o mi perplejidad, según el ánimo del momento.

Creía que hoy iba a tener uno de esos momentos en los que , alguien fantástico al que quiero con toda mi alma iba a darme un rato de maravillosa complicidad, dejándome soltar lo que me apeteciera. Para mi sorpresa toda ha terminado justo al revés.

Y no es porque no me haya dado su calor y su cariño con pasión, como siempre hace.
Sin embargo, en un momento, me he encontrado escuchando como describía el bajón que estaba sintiendo, su cansancio, sus deseos de alejarse del mundo.
Oía su tristeza, su preocupación, su necesidad de que las cosas cambien. Y solo quería consolarlo.

Más allá de mi misma y de mis problemas, solo pensaba como transmitirle un poco de mi fé en él y en la vida; como demostrarle que siempre tendrá mi apoyo y el de muchas personas que seguro que le quieren, porque se lo gana sin descanso; como conseguir que se sintiera mejor y verlo sonreir.

Creo que lo he conseguido un poco, porque ha vuelto a sonreírme ( siempre lo hace) , aunque al final me ha hecho llorar. Es posible que él haya creído que era de tristeza, pero en realidad era gratitud. No he sido capaz de explicárselo en persona por eso quiero decírselo ahora.
Porque me ha mostrado que sigo siendo yo, que a pesar de como me encuentre su dolor me importa más que el mio propio y que siempre arrimaré el hombro por lo que vale la pena sean cuales sean mis circunstancias.


Gracias, mi pequeño gran hombre, por recordarme que mi ombligo no es lo más importante de éste mundo.

domingo, 11 de mayo de 2008

Agujeros negros

Hace tiempo que describí las pérdidas sufridas como agujeros negros.

Cuando ya no tienes aquello que te hacía funcionar, sientes en tu alma un vacío frío y oscuro, como creo que son esos dichosos agujeros en el universo.


Lo sentí cuando perdí a mi querido amigo (hermano) Hilario despues de una penosa enfermedad.


Cuando me dejaron mis segundos padres, los dos a un tiempo, en un trágico accidente.


Cuando perdí a gran parte de mi familia por un cúmulo de malos sentimientos mal encauzados e imposibles de solucionar.


Cuando perdí al amor de mi vida.


Cuando perdí a mi madre.


Cuando perdí a mi padre.


¿Cuantos agujeros negros puede acoger mi alma?


Es posible que esté frente al próximo, por eso hoy he escrito en este esperanzador color.

Y si al final no me sale bien, sólo me queda volver a empezar.


Como diría Kypling: como cuando empecé y sin exhalar jamás una queja sobre la pérdida sufrida.

domingo, 4 de mayo de 2008

In memoriam (Relato 4)

26 de Diciembre. Estába anocheciendo y hacia un frío respetable, pero ellos no lo notaban. Al menos él, que ese día se jugaba el resto de su vida. Había oído decir a un amigo que ella le gustaba y que íba a pedirle que fuera su novia, y él no podía permitírlo. Así que armándose de valor la había invitado a pasear y buscaba el momento propício para decírselo.

Seguramente pensaba que el día acompañaba, al fín y al cabo la Navidad siempre saca lo mejor de las personas y ellos, aunque solo amigos, siempre se habían llevado bien y estaban a gusto juntos.
"Tengo que hacerlo" se decía mientras daban la enésima vuelta por la acera que llevaba justo desde la casa de los padres de ella a la de los padres de él.

"Allá voy"...
"¿Quieres que seamos novios?" y ella que lo mira y le sonríe. Y vuelve a mirarlo y le dice: " me caes bien y estamos a gusto juntos" ... silencio, él empieza a sudar. "Yo no te quiero pero si quieres probamos".
No era un sí rotundo, pero tampoco era un no, ¿ que podía perder? . Asi que probaron y despues de tres años de noviazgo se casaron. Fueron la pareja de novios más apuesta, gentíl y hermosa que nunca se había visto.
Y se multiplicaron, primero el niño y despues las dos niñas, de golpe. No estaba mal.

Y se amaron, se apoyaron, se solidarizaron y se compenetraron hasta formar uno solo.
(¿Alguien recuerda como empezaron?, exacto , ella le dijo que no le quería. ¡Pues si llega a decirle que sí!)

Cualquier cosa que a ella le gustaba era importante para él; cualquier idea, afición o propuesta que él hiciera era secundada por ella con verdadera pasión.
Nunca dejaron de estar juntos, ni en los grandes momentos ni en los más insignificantes. Hasta los amigos se burlaban de ellos diciendo que aquello no era normal y que ya estaban empalagando. Pero ellos se reían y seguían a su manera.

El le repitió hasta la saciedad que nunca lo abandonara porque sin ella no podría vivir, y ella se reía diciéndole que era un miedica.

Y pasaron los años y trás los hijos llegaron los nietos y ellos seguían igual, derrochando su amor, su preocupación y su apoyo a toda su familia. Y a sus amigos de toda la vida; y a sus compañeros del colegio de la infancia; y a sus chicos del baloncesto; y a sus compañeros de partido; y a las nuevas familias que sus hijos crearon; y a sus compañeros de trabajo; y a sus aficiones; y a su música; y a su Valencia C.F.; y a su tierra ...

Y de repente, sesenta años después, sin hacer caso de lo que él le había advertido tantas veces, ella se fué. Para siempre, sin previo aviso, sin casi tiempo para las despedidas. Y él ya nunca fué el mismo.
Y todos le decían : tienes que sobreponerte. Pero él se había quedado solo.
Como aquella vieja canción él la había "querido a morir". Y eso hizo: morirse.

Ahora que ya no están, los que tuvimos el honor de conocerlos y compartir su vida tenemos el consuelo de saber que vuelven a estar juntos.

Para toda la eternidad.



(A mis padres)