viernes, 10 de septiembre de 2010

Cien por cien humana

Lo prometido es deuda, que como ya dije en un post anterior que os contaría lo que soy capaz de hacer por mis despistes, pues hoy voy a lanzarme para regocijo general. Aunque tampoco creo que sean para tanto, al fin y al cabo....cosillas de las prisas, creo (jejeje).



Como guardar las servilletas en la nevera... o la leche en el armario de los vasos.

Rebautizar a alguien sólo porque mi cerebro piensa que le va mejor otro nombre, y venga a llamarle Arturo ( por ejemplo) cuando en realidad se llama Julián.

Volver hasta tres veces sobre mis pasos, primero porque no he cogido el papelito con el dichoso número que hay que recargar, después porque tampoco cogí el papelito sino el teléfono y por último porque cogí el papelito y me dejé la cartera. Pero ¿y lo que gano en ejercicio?.

Entrar en la cocina y quedarme mirando al vacío porque no consigo que mi cerebro me diga a qué narices había ido allí. Debe ser porque en mi casa la cocina es el sitio de reunión y mis pasos ya van automaticamente a ella.

Darle la cena dos veces a los perros, cuando en realidad la segunda había salido a regar. Claro que engañan mucho, que es verte con el pienso y dan saltos como si no hubieran comido en un mes los jodíos. Y claro, al día siguiente cuando veo las plantas chuchurrías por el calor me digo: anda, si no he regado.

No encontrar algo porque lo guardé tan bien que ni yo misma se dónde lo puse. Menos mal que era importante...¿no?

¿Le había puesto suavizante a la lavadora?.....es una de mis grandes dudas existenciales.

Quedar con trés personas al mismo tiempo porque me dejé la agenda encima del piano ( aunque no es probable, porque yo no tengo piano).

En fín, lo normal. Al fín y al cabo siempre consigo solucionarlo.
Además...¿quén quiere ser perfecto?
¡¡Menudo aburrimiento!!

6 comentarios:

pseudosocióloga dijo...

¿Qué horóscopo eres?

El guardian del Faro dijo...

Sagitario, querida mía.....¿te extraña?

Maria dijo...

Yo también pienso que ser perfecto es un aburrimiento. Hay que tener un toque personal.

Anónimo dijo...

Creo que te olvidas de lo más gracioso, aunque más que despiste olvidadizo se podría encajar en la categoría despiste gracioso porque... ¿quién sino tú cogería el mando del ono y se lo llevaría todo el día detrás?

:)

El guardian del Faro dijo...

¡¡jajaja!!....cierto. ¿y el día que me llevaba el inalámbrico porque pensaba que era el móvil?

;DD

Anónimo dijo...

Ufff, yo también soy un despistado sin remedio... Pero luego estas anécdotas nos hacen hasta graciosos jeje

Besos.